Se había dejado la persiana levantada, y los rayos del sol hacían sus primeros incisos sobre nuestra habitación desorganizada, llena de amor en efervescencia.La habitación se iba iluminando poco a poco, empezando por el suelo, recorriendo todo el rastro de ropa que había sobre el, después, decidieron subirse a la cama, iluminando unos pequeños pies encogidos que asomaban por debajo de las sábanas.Los rayos me dieron por completo en plena cara.Buenos días, pensé.¿Qué hora era? No tenia reloj, y tampoco quería tenerlo.Me dolia la cabeza, culpa del alcohol ingerido ayer por la noche supongo.Decidí darme la vuelta, para estirarme un poco, y cuando giré mi cuerpo por completo...allí lo ví, junto a mí.
Tenía la espalda descubierta, totalmente desnuda, caliente, como siempre, y con ese surco tan perfecto que dibujaba su columna vertebral.Estaba dormido, casi parecía bueno, y digo parecía, porque es un cabrón, pero me gusta, y empiezo a pensar que le quiero.Estaba abrazado a la almohada, con la cara sobre ella.Sonrío.Creo que sabe que le estoy mirando, porque el abre los ojos, y me pilla en plena faena, con los ojos bien iluminados y brillantes, sonriendo como una estúpida junto a él.
-Buenos días.-susurra.
No ha puesto ninguna cara de extrañeza, ni tampoco le ha echado la culpa al alcohol.Simplemente ha abierto los ojos y ha sonreído.Me quedo allí sentada, mirándolo, pensando en como cojones ha podido acabar ocurriendo eso que llevo queriendo que ocurra durante meses, y meses.
Siento que un cosquilleo me recorre el cuerpo.Él, abre las sábanas y me invita a que me tape por completo, y me vuelva a perder entre sus piernas.Me acurruco junto a él, delizo mi mano sobre el surco de su espalda, desde el nacimiento del pelo, por la parte central, por abajo, mas abajo, y más allá de donde empieza la sábana.Siento el calor que desprende su cuerpo,y las ganas que tengo de que el mio también lo haga.Veo como sonrie, y me agarra del cuello y me obliga a besarlo ; un beso lento, mojado, húmedo, largo...perfecto.Como todos los de él.Me acero mas a él...y comienza a besarme el cuello.Yo intento resistirme, me hace cosquillas, pero no puedo resistirme, acaba de activar el peligroso radar de mi cuerpo.Acaba de enfurecer a un león, acaba de apretar el botón para alcanzar al cielo.Me coloco debajo de él.Me dejo besar, le toco el pelo, me pierdo en él, en sus besos, en su perfume...Todo es tan de verdad, que me acojono cuando pienso, en tus pequeñas dudas y eso,que si no te tengo reviento...quiero hacertelo muy lento.
Todo-Pereza (L Que andes bien!Un Beso.
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