1 de noviembre de 2010

-Solíamos hablar de nuestro futuro.De una casa en la Gran Vía de Madrid, con una habitación sólo para mis libros, de un pequeño ático en el centro de Manhattan para escaparnos de vez en cuando, cuando el mundo se nos quedase grande.De los libros que escribiría con nuestra historia plasmada en ellos, uno tras otro, hasta conseguir igualar el número de publicaciones de Shakespeare.¿Recuerdas?
+Si.
- ¿Dónde ha quedado todo eso?¿Que nos está pasando?Esto no es lo que quería.Me siento tan vacía, tan perdida.No encuentro el camino para salir.
+¿Recuerdas cuando me hacías sentarme a tú lado en el sofá para ver cientos de veces esas películas que tanto te gustan?
- Claro.¿Que quieres decirme con esto?
+¿Recuerdas, que un día te pregunte porque te gustaba tanto ver todas aquellas películas tantas veces, y porque leías cientos de veces esos libros que tanto te gustaban sin dejarlos a medias?¿Recuerdas que contestaste?
- Sí, que me gusta saber como acaban las historias.
+Exacto, es justamente lo que está pasando ahora.



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